Hay dos Thoreaus. El asceta que pasó años aislado en el bosque donde se inspiró para escribir la obra "Walden" y el revolucionario que prefirió ir a la cárcel antes que pagar unos impuestos que consideraba injustos. En "Walden", y sin quererlo, inventó el minimalismo: "Nuestra vida se esfuma en los detalles... Un hombre honrado pocas veces necesita contar más que sus diez dedos, o, en casos extremos, puede añadir los otros diez de los pies . ¡Sencillez, sencillez! Que tus asuntos sean dos o tres y no cien o mil. En medio de este mar picado de la vida civilizada, un hombre tiene que vivir haciendo cálculos si no quiere naufragar e ir al fondo y sin duda ha de ser un gran calculador el que triunfe. ¡Simplifica, simplifica! En lugar de tres comidas por día, no comas más que una si es preciso; cinco platos en lugar de cien; y reduce todas las demás cosas en esa proporción..." Su etapa revolucionaria es, sin embargo, mucho más interesante. Thoreau partía de la base de que la autoridad del gobierno era impura, y que no podía tener derecho absoluto sobre su persona y propiedad sino en cuanto él se lo concediera. De aquí que afirmara que el mejor gobierno es el que no tiene que gobernar en absoluto, y que bajo un gobierno que encarcela injustamente, el verdadero lugar para un hombre justo está en la cárcel. Cuando fue encarcelado por no pagar impuestos, lejos de enojarse, sintió pena al comprobar que la mayor utilidad que de él podía obtener el Estado era encerrarlo, en lugar de beneficiarse de alguna manera con sus servicios. Al igual que Thoreau, yo también desearía retirarme de todas las sociedades a las que nunca me he inscrito, pero tampoco se dónde encontrar la lista completa.
Tuesday, January 22, 2008
THOREAU RULES
Hay dos Thoreaus. El asceta que pasó años aislado en el bosque donde se inspiró para escribir la obra "Walden" y el revolucionario que prefirió ir a la cárcel antes que pagar unos impuestos que consideraba injustos. En "Walden", y sin quererlo, inventó el minimalismo: "Nuestra vida se esfuma en los detalles... Un hombre honrado pocas veces necesita contar más que sus diez dedos, o, en casos extremos, puede añadir los otros diez de los pies . ¡Sencillez, sencillez! Que tus asuntos sean dos o tres y no cien o mil. En medio de este mar picado de la vida civilizada, un hombre tiene que vivir haciendo cálculos si no quiere naufragar e ir al fondo y sin duda ha de ser un gran calculador el que triunfe. ¡Simplifica, simplifica! En lugar de tres comidas por día, no comas más que una si es preciso; cinco platos en lugar de cien; y reduce todas las demás cosas en esa proporción..." Su etapa revolucionaria es, sin embargo, mucho más interesante. Thoreau partía de la base de que la autoridad del gobierno era impura, y que no podía tener derecho absoluto sobre su persona y propiedad sino en cuanto él se lo concediera. De aquí que afirmara que el mejor gobierno es el que no tiene que gobernar en absoluto, y que bajo un gobierno que encarcela injustamente, el verdadero lugar para un hombre justo está en la cárcel. Cuando fue encarcelado por no pagar impuestos, lejos de enojarse, sintió pena al comprobar que la mayor utilidad que de él podía obtener el Estado era encerrarlo, en lugar de beneficiarse de alguna manera con sus servicios. Al igual que Thoreau, yo también desearía retirarme de todas las sociedades a las que nunca me he inscrito, pero tampoco se dónde encontrar la lista completa.
Monday, January 21, 2008
NONE OF THE ABOVE
Sunday, January 20, 2008
SUCH A BEAUTIFUL SONG!!!
I'll light the fire
You place the flowers in the vase
That you bought today.
Staring at the fire
For hours and hours
While I listen to you
Play your love songs
All night long for me, only for me.
Come to me now
And rest your head for just five minutes.
Everything is done.
Such a cosy room,
The windows are illuminated
By the evening sunshine throughthem
Fiery gems for you, Only for you.
Our house is a very, very, very fine house,
With two cats in the yard.
Life used to be so hard,
Now everything is easy
'Cause of you
I'll light the fire
While you place the flowers in the vase that you bought today
Friday, January 18, 2008
THE LAST GODFATHER
"If you think your boss is stupid, remember: you wouldn't have a job if he was any smarter" (John Gotti)
Bonnano, Colombo, Genovese, Gambino y Lucchese. Recitado de carrerilla puede parecer la defensa del Inter de Milan. Pero no. Son las Cinco Familias más importantes de la Mafia italo-americana de Nueva York. John Joseph Gotti Jr. lideró a los Gambino desde 1985 hasta su muerte en 2002, en el penal de Springfield (Missouri), y pasará a la historia como el último de los capos clásicos y como la figura más legendaria de la Mafia neoyorquina.
Gotti, gran admirador de Al Capone, y también conocido como Teflon Don, porque nunca se le pegaban ni las acusaciones por los negocios sucios ni los intentos del FBI por encerrarlo, fue el último gran Don. Fue el más temible y sanguinario de los padrinos, y a su vez elegante en exceso y extremadamente meticuloso con su corte de cabello. Representaba a la perfección aquellos personajes que magistralmente llevó a la pantalla Francis Ford Coppola en su trilogía de El Padrino. Como mandan los cánones, se hizo con el poder del clan de la única manera posible: asesinando al jefe de la familia a plena luz del día en un restaurante de Manhattan. Y como también está escrito, acabó con sus huesos en la cárcel traicionado por Salvatore Gravano, su lugarteniente. Cuando fue detenido en un club de Little Italy, James Fox, el agente del FBI que lo había perseguido obsesivamente durante años, acuñó una frase memorable: "Se acabó el teflón. El Don está cubierto de velcro, y todos los cargos se le pegan". A los cincuenta y un años de edad fue condenado a cadena perpetua. En la cárcel pasó aislado 23 horas al día, hasta que un cáncer de garganta se lo llevó a la tumba. El funeral estuvo a la altura de su elegancia. Ataúd de bronce macizo y una caravana de más de cien limusinas que se desplazaron desde su casa de Queens hasta el cementerio. La muerte de John Gotti supuso el fin de una época y de una manera de actuar de la delincuencia organizada. Ahora Brooklyn está en manos de la mafia rusa. A efectos prácticos es lo mismo. Pero no es igual.
Saturday, January 12, 2008
POETRY AND THE CITY
April come she will
When streams are ripe and swelled with rain;
May, she will stay,
Resting in my arms again.
June, she'll change her tune,
In restless walks she'll prowl the night;
July, she will fly
And give no warning to her flight.
August, die she must,
The autumn winds blow chilly and cold;
September I'll remember
A love once new has now grown old.
Saturday, January 05, 2008
THE POWER OF SILENCE
No le recordaremos por sus récords, sino por su persona. Joe DiMaggio permanecerá como símbolo de excelencia, poder y caballerosidad. (The New York Times)
Guardo una camiseta con el número 5 de los Yankees como oro en paño. Detrás, grabado el nombre del último gran héroe americano. Joseph Paul Di Maggio, (Martínez, California 1914 - Hollywood, California, 1999) , no es, ni por asomo, un deportista de mi generación, pero cambiaría cualquiera de mis bienes por haber presenciado alguno de sus hits en el Yankee Stadium del Bronx, donde compartió equipo con figuras de la talla de Babe Ruth, Lou Gehrig, Yogi Berra, Phil Rizzuto y Mickey Mantle. Répoker de ases.
Hijo de inmigrantes italianos -su padre era un pescador siciliano-, creció en la pobreza en San Francisco y se convirtió en el jugador de béisbol más conocido de la historia. En 1941, el país entero se paralizó cuando consiguió la que es considerada más grande proeza del deporte americano, al lograr batear al menos un hit* durante 56 juegos consecutivos.